Publicada el domingo
23 como solicitada en Página 12, esta carta del secretario general de la
Central refleja el agradecimiento de toda la conducción a las afiliadas
y afiliados.
A las compañeras y compañeros que fueron a votar y a los que hicieron posible que se pudiera votar:
Queremos expresarles nuestro agradecimiento por la formidable jornada electoral que en el día de ayer nos permitió, a decenas de miles de trabajadores, en todo el país, ser protagonistas de un momento trascendente de la vida de la CTA.
Fue el momento de reencontrarnos con la mejor tradición de la vida de nuestra Central: la democracia sindical.
Fue un acto de participación en el que cerca de 200.000 afiliados de distintas organizaciones gremiales y sociales nos desviamos de nuestra rutina cotidiana para darnos el tiempo y la posibilidad de ser protagonistas a través del voto. Un verdadero acto de reparación que significó demostrarnos y demostrar que éramos capaces de borrar de la piel de nuestra Central la mancha que había dejado el bochornoso desenlace de la fallida elección de 2010.
Era necesario atrevernos a votar con el orgullo y la alegría de ser parte de esa identidad colectiva que es la CTA de los Trabajadores.
Era necesaria la osadía de activar un mismo día 4216 mesas electorales en todo el país y garantizar que esta vez todo fuera distinto, es decir, recreando el clima fraternal que debe caracterizar un acto electoral de trabajadores. En definitiva, demostrar que la confrontación entre corrientes que disputan por proyectos políticos sindicales se puede hacer en un clima de respeto, sin patotas, sin presiones y, sobre todo, asegurando el derecho de las y los compañeros a que el acto de votar sea la prioridad absoluta a resguardar. Y la conclusión a la que felizmente arribamos es que fuimos capaces de hacerlo sin que nada empañara este día de militancia y participación.
La Conducción de la CTA de los Trabajadores que, a partir de ahora, asumiremos por un nuevo período de cuatro años, no puede menos que sentirse orgullosa y agradecida del mandato recibido. Mandato que, de cara a 2015, un año bisagra que la clase dominante pretende convertir en la antesala del “fin de ciclo” y la restauración neoliberal, nos plantea el enorme desafío de sostener el avance de las conquistas sociales sin relegar el rol político de una Central que debe seguir siendo una pieza gravitante en la consolidación del entramado de fuerzas populares comprometidas con la continuidad del proyecto nacional iniciado en 2003.
Ahora nos toca a nosotros estar a la altura del compromiso asumido, invocando el ejemplo de los que nos enseñaron que ser dirigentes sindicales es tener más compromisos militantes y no más privilegios.
A los mineros de Río Turbio que votaron al amanecer allá bien al sur, a los maestros y maestras de la selva misionera, a los obreros de las fábricas del conurbano y de Rosario, a los trabajadores estatales, a los cooperativizados y a los autogestionados, a los campesinos, a los jubilados, a los jóvenes, a todos los que sintieron que era importante fortalecer con el voto a la CTA, porque siguen creyendo en la fuerza de la unidad y la organización de la clase trabajadora.
¡GRACIAS !
HUGO YASKY - Secretario General CTA de los TRABAJADORES
Queremos expresarles nuestro agradecimiento por la formidable jornada electoral que en el día de ayer nos permitió, a decenas de miles de trabajadores, en todo el país, ser protagonistas de un momento trascendente de la vida de la CTA.
Fue el momento de reencontrarnos con la mejor tradición de la vida de nuestra Central: la democracia sindical.
Fue un acto de participación en el que cerca de 200.000 afiliados de distintas organizaciones gremiales y sociales nos desviamos de nuestra rutina cotidiana para darnos el tiempo y la posibilidad de ser protagonistas a través del voto. Un verdadero acto de reparación que significó demostrarnos y demostrar que éramos capaces de borrar de la piel de nuestra Central la mancha que había dejado el bochornoso desenlace de la fallida elección de 2010.
Era necesario atrevernos a votar con el orgullo y la alegría de ser parte de esa identidad colectiva que es la CTA de los Trabajadores.
Era necesaria la osadía de activar un mismo día 4216 mesas electorales en todo el país y garantizar que esta vez todo fuera distinto, es decir, recreando el clima fraternal que debe caracterizar un acto electoral de trabajadores. En definitiva, demostrar que la confrontación entre corrientes que disputan por proyectos políticos sindicales se puede hacer en un clima de respeto, sin patotas, sin presiones y, sobre todo, asegurando el derecho de las y los compañeros a que el acto de votar sea la prioridad absoluta a resguardar. Y la conclusión a la que felizmente arribamos es que fuimos capaces de hacerlo sin que nada empañara este día de militancia y participación.
La Conducción de la CTA de los Trabajadores que, a partir de ahora, asumiremos por un nuevo período de cuatro años, no puede menos que sentirse orgullosa y agradecida del mandato recibido. Mandato que, de cara a 2015, un año bisagra que la clase dominante pretende convertir en la antesala del “fin de ciclo” y la restauración neoliberal, nos plantea el enorme desafío de sostener el avance de las conquistas sociales sin relegar el rol político de una Central que debe seguir siendo una pieza gravitante en la consolidación del entramado de fuerzas populares comprometidas con la continuidad del proyecto nacional iniciado en 2003.
Ahora nos toca a nosotros estar a la altura del compromiso asumido, invocando el ejemplo de los que nos enseñaron que ser dirigentes sindicales es tener más compromisos militantes y no más privilegios.
A los mineros de Río Turbio que votaron al amanecer allá bien al sur, a los maestros y maestras de la selva misionera, a los obreros de las fábricas del conurbano y de Rosario, a los trabajadores estatales, a los cooperativizados y a los autogestionados, a los campesinos, a los jubilados, a los jóvenes, a todos los que sintieron que era importante fortalecer con el voto a la CTA, porque siguen creyendo en la fuerza de la unidad y la organización de la clase trabajadora.
¡GRACIAS !
HUGO YASKY - Secretario General CTA de los TRABAJADORES