El teatro Cervantes y  otra geografía humana, otras voces y los palcos colmados por rostros,  todos esperando la llegada del presidente Evo Morales y hasta el asombro  de las hermanas bolivianas con sus trajes tradicionales y sus saberes:  ¡Jallalla Evo! ¡Jallalla Bolivia! ¡Jallalla Hugo! Madre Tierra. Y desde  los palcos cuelgan banderas de Pueblos Originarios, de la CTA, CTERA, SUTEBA, UTE, SUTNA, FeTIA, Telefónicos, Agrupación Pocho Leprati en la Lista Azul de ATE, Frente Transversal, MTL Agustín Tosco, Juventud, FTV, Miles, Segundo Centenario, Organización Territorial Germán Abdala, Comedor Los Pibes, etc.
Para comenzar el acto Marcelo “Nono”  Frondizi es el encargado de leer un documento donde la Central y los  trabajadores bregan por una salida al mar, territorio que le fuera  arrebatado a Bolivia en una lucha de intereses imperiales y de sectores  oligárquicos. 
Luego es el turno de Hugo Yasky,  secretario general de la CTA, quién luego de los saludos pasó al reconocimiento de las luchas populares y a rearfimar “el papel fundamental de la unidad estratégica de los pueblos y  de la clase trabajadora de América Latina”. 
“Y esta posibilidad de tener a un luchador como Evo Morales que no  aprendió lo que era la pobreza leyendo los libros, lo descubrió en las  entrañas de la tierra, que es parte de la lucha milenaria. Que Evo  Morales esté hoy acá, recibiendo el justo homenaje de la clase  trabajadora argentina - porque estamos seguros que hoy mas allá de las  siglas estamos hablando en nombre de todos. Estamos todos sumados a este  reconocimiento”.
Lula nos decía hay que recordar siempre la frase del maestro Paulo  Freire; “Hay que saber unir a los diferentes para enfrentar a los  antagónicos”. Los que no ven la diferencia terminan al servicio de los  antagónicos, esos son los que pierden el camino: no hay que perder el  camino, hay que saber que en la unidad de nuestros pueblos esta la  verdad”.
Evo Morales en el estrado. “Nunca pensé, nunca soñé y a veces no creo que soy presidente, me siento más dirigente sindical que presidente". Y dice: “Me acuerdo perfectamente cuando con el compañero Hugo y un  grupo de compañeros estuvieron en Santa Cruz de las Sierra expresando la  solidaridad para rechazar esa conspiración que enfrenté como  presidente. Nunca me voy a olvidar de la solidaridad del compañero Hugo,  todos los trabajadores y en especial el movimiento campesino originario  y que recuerdan a la Central de Trabajadores de la Argentina, muchas  gracias hermanos y hermanas.” 
Evo habla de alguna vez siendo joven estando en Perú, vió junto a otros  compañeros el mar. Y lloraron. Evo se toca el corazón suavemente con el  puño y dice: está aquí. Como si la memoria de la tierra, de hechos que  sucedieron antes que él naciera, estuviera grabada al fuego de un  despojo y que eso no se rompe en la memoria. Eso está, eso estará  siempre. Habla del agua: “El agua, la  energía, no pueden ser negocios privados. Los recursos naturales deben  ser el pueblo bajo la administración del estado”                                                                                                                                                                                                                       “La mejor forma de salvar a  la humanidad es defendiendo los derechos de la Madre Tierra. Es vivir en  armonía con la naturaleza. Tengo confianza en que los trabajadores y  dirigentes de Latinoamérica van a plantear esta nueva tesis política a  lo largo de todo el mundo”. Que se convoquen a los trabajadores y a  distintos sectores para elaborar el primer borrador, el segundo  borrador, convocando a grandes conferencias, de esta nueva tesis  política para salvar a la vida y la humanidad que no sean propuestas que  nos imponen,  consultores ni el Banco Mundial ni el Fondo Monetario  Internacional, yo creo que somos capaces de generar  buenas propuestas”.
Fue el fin de un día distinto. Un día que quedará metido en la memoria,  será memoria, con un final donde teatralmente –estamos en un teatro-  bajó la plataforma donde están Evo, Hugo y cuando llegó a nivel de piso,  Evo fue a abrazar a Hebe y a todas la Madres.  Y un poco delirio, y  mucho que seguirá retumbando, el retumbar desde donde se emite un  discurso y, primero Hugo y después Evo, ellos hablan -y son- desde los  trabajadores, desde la clase trabajadora. Y al que no le gusta, se jode.