La Mesa Nacional de
la Central de Trabajadores de la Argentina reunida el día 20 de enero
para considerar la grave situación generada por la muerte del Fiscal
Alberto Nisman, entiende necesario hacer públicas las siguientes
consideraciones.
Dadas las características de este hecho y el contexto en el que se
produce, desde la CTA entendemos imprescindible avanzar en el total y
completo esclarecimiento de lo sucedido. Para ello es necesario ir a
fondo con la investigación de todas las circunstancias que precedieron a
este trágico desenlace. Este suceso no debe ser materia de especulación
política, de la que se pretenda sacar rédito electoral. Por el
contrario, más allá del color partidario, éste debería ser para todos el
punto de inflexión a partir del cual pueda sacarse a la luz del día el
entramado mafioso, que desde hace décadas y pese a los 31 años de
democracia, sigue actuando como un poder fáctico con capacidad de
desestabilizar gobiernos y de generar zozobra en la ciudadanía.
Es evidente que el clima generado a partir de la muerte del Fiscal Nisman pretende ser aprovechado por estos mismos grupos de poder que sueñan con “el fin de ciclo” para cortar de cuajo el proceso de verdad y justicia iniciado en el 2003, los avances en la distribución de la riqueza y, más recientemente, la reivindicación de nuestra soberanía nacional ante la embestida de los fondos buitres.
Los sectores populares, en particular los trabajadores y trabajadoras, somos concientes de que seríamos nosotros los que pagaríamos el costo más alto si el revanchismo de la restauración neoliberal, que promueven estos grupos dominantes, lograra finalmente imponerse. Para ello buscan que este gobierno llegue a su fin en un escenario de caos e ingobernabilidad, que borre definitivamente del imaginario colectivo la reivindicación del Estado como garante de políticas públicas, la Integración Regional y el crecimiento económico con inclusión social.
Pero también es cierto que todos estos años de avances populares no han sido en vano y somos mayoría los argentinos que hemos aprendido que los problemas de la democracia sólo se resuelven con más democracia. Por ello vamos a defender todas y cada una de las conquistas de estos últimos años, con la conciencia de que con instituciones más transparentes, con ampliación de derechos y con distribución de la riqueza podremos alcanzar una Argentina plena de paz y justicia social.
CTA NACIONAL
Es evidente que el clima generado a partir de la muerte del Fiscal Nisman pretende ser aprovechado por estos mismos grupos de poder que sueñan con “el fin de ciclo” para cortar de cuajo el proceso de verdad y justicia iniciado en el 2003, los avances en la distribución de la riqueza y, más recientemente, la reivindicación de nuestra soberanía nacional ante la embestida de los fondos buitres.
Los sectores populares, en particular los trabajadores y trabajadoras, somos concientes de que seríamos nosotros los que pagaríamos el costo más alto si el revanchismo de la restauración neoliberal, que promueven estos grupos dominantes, lograra finalmente imponerse. Para ello buscan que este gobierno llegue a su fin en un escenario de caos e ingobernabilidad, que borre definitivamente del imaginario colectivo la reivindicación del Estado como garante de políticas públicas, la Integración Regional y el crecimiento económico con inclusión social.
Pero también es cierto que todos estos años de avances populares no han sido en vano y somos mayoría los argentinos que hemos aprendido que los problemas de la democracia sólo se resuelven con más democracia. Por ello vamos a defender todas y cada una de las conquistas de estos últimos años, con la conciencia de que con instituciones más transparentes, con ampliación de derechos y con distribución de la riqueza podremos alcanzar una Argentina plena de paz y justicia social.
CTA NACIONAL
